El otro día, mi vecina vino a dejarle su portátil a mi primo que se dedica a la reparación de ordenadores, para que le instalase un antivirus... Cual va siendo la sorpresa que en la papelera de reciclaje estaban estas fotos que aquí os presentamos, solo que hemos cubierto el rostro por respeto a ella, pero mostramos lo demás para vuestro disfrute... Mal no está la tía.